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  • Foto del escritorEscenarios Saludables

Relato de mi visita a Monte Quemado.

Lic. Silvana Labat.

Psicóloga. Voluntaria de “Escenarios Saludables”


“Acá son dos besos” nos dijo el doctor Raúl Morello, y ahí reaccione ¡¡¡ya estábamos en el convento, Compañía de la cruz, de Monte Quemando, Santiago del Estero!!!.

En cada encuentro de Escenarios Saludables, en el comienzo de las capacitaciones, algún voluntario siempre cuenta donde y como se creó la ONG, pero yo nunca había imaginado el lugar, su gente, sus historias y tuve la oportunidad de vivirlo de manera presencial, como se dice en criollo, en carne y hueso.


Mi experiencia con respecto a lo acontecido y cuando me refiero al termino acontecido lo hago desde lo singular, desde lo que significó para mi esta oportunidad; fue realmente de puro aprendizaje a nivel espiritual y académico.


Sinceramente no estaba segura de viajar, cuando nos enviaron el mensaje avisándonos de que había dos lugares en la avioneta, fantasee con la idea, pero necesite un tiempo de proceso.

Lo hable con mi familia, se los plantee y me apoyaron desde el principio; Así que le confirme al Dr. Morello mi lugar en el vuelo hacia Monte Quemado.


La avioneta despego 06.15 hs; debut para mí en ese medio de transporte, tuvimos el placer de viajar con doctoras de la ONG “Cuerpo y Alma” que iban al Chaco; mis pensamientos estaban revolucionados…

Llegamos a Monte Quemado. Nos esperaba Hugo quien nos llevó al convento donde nos recibió Nelly con su mejor sonrisa, alegre de ver al doctor Morello y a nosotras. Cuando digo a nosotras sumo al relato a mi compañera Elisa, a quien conocí en esta hermosa vivencia, de la cual aprendí mucho y me trasmitió tranquilidad para afrontar el devenir de esta experiencia.


"Los científicos dicen que estamos hechos de átomos, pero a mí un pajarito me contó que estamos hechos de historias” -Eduardo Galeano

El día sábado tuve la oportunidad de conocer a más de 30 personas aproximadamente, de las cuales me queda un hermoso recuerdo de cada una de ellas. Sí, les cuento que al mirar mis anotaciones puedo recordar la cara, la historia y la angustia que nos atravesaba en ese momento.


Vale aclarar, como le dije al Doctor y a Elisa, que al principio no sabía cómo hacer, me refiero a la incertidumbre que me generaba estar con estas personas un ratito y nada más. Escuchar y no saber si iba a poder a ayudarlas, quería certezas o pretendía un manual que me guiara, pero me duro poco esta sensación y todo comenzó a fluir.


Me sentí cómoda, disfrute de escuchar y empatizar con estas personas que depositaron en mí sus vivencias, padecimientos, mandatos, rituales, mitos y creencias culturales que por momentos les generan sufrimiento y falta de mirada hacia un futuro. Falta de proyectos. Un vacío difícil de llenar.

Cuando utilizo el termino empatía me produce controversias porque considero que es imposible sentir lo mismo que un otro, somos seres individuales y con historias de vida únicas e irrepetibles. De todos modos, abrí mi corazón a la escucha y valoré cada palabra que estas personas confiaron en mí.

A nivel personal me llevo muchísimo aprendizaje y agradezco a cada una de las personas que nos esperó con paciencia y amabilidad a ser atendida.


Agradezco la confianza de poner en palabras, en lágrimas y con enojo cada historia de vida, sus significados y el sufrimiento que esto produce.

Agradezco al Dr. Morello por trasmitirme su experiencia y sus conocimientos de manera humilde y sencilla, desde la práctica y desde el respeto por el otro, un otro que sufre.

Agradezco a Hilda, Marta y Nelly por la atención y la contención. Hermosas personas que brindan su tiempo con el corazón y de manera desinteresada. También a Elisa que compartimos habitación y nos contuvimos desde el respeto y la solidaridad para afrontar esta experiencia que habíamos elegido. A la hermana Eucaristía y al personal del convento (Natalie) que estuvieron a disposición nuestra acompañándonos durante los tres días. A Marcos por confiar en mí.

Me llevo como escuche por ahí; una tesis o un posgrado en:

· Respeto por el otro,

· Aprendizaje puro y sin filtro (no está en los libros)

· Realidades que atraviesan y afectan

Nuevamente celebro y doy las gracias por haber formado parte de este viaje a Monte Quemado, espero volver y seguir aprendiendo de ustedes.

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